viernes, 23 de agosto de 2024

La vida, reivindico mi sitio.

 


Veinticuatro años andando, el doble experimentando vida, un orgasmo teatral… al leer un buen libro, una caricia a tiempo, un paisaje, un buen vino, un viaje, todo es vida… también la tristeza de una guerra, el llanto apagado de una residencia, (antesala de la muerte), el abrazo agónico de la miseria… la maratón diaria, a veces confusa de mi pensamiento, el amanecer, el ocaso alegre de un día triste, la realidad.

Veinticuatro años andando y después qué, pensando como entrar al rol de oropeles confusos en el que vive una sociedad aniñada, me niego, mi maratón, la de hoy también fortalecerá el vicio que tengo por experimentar vida sin dar un paso, porque la luz de mis ideas no se apague aunque la sociedad me discrimine por el hecho de no caminar con los pies,  de no poder dar la mano porque se solidarizaron con las piernas y están quietas también.

Hay vidas que no me interesan pero son vida también, el botellón, el maltrato, la humillación… Orgasmo teatral, cuantas vidas en la vida y la mía también, callada, quieta, bulliciosa… luchando por seguir soñando como cuando uno aprende a montar en bicicleta siendo niño.

Mi hijo, mi compañera, toda mi familia, los amigos, una vida dulce, viva, como la inquietud de un adolescente. “Gracias camino, por aplanar las cuestas y enderezar la vereda”...

Orgasmo teatral, vida llena de vidas, cambiaron mis sueños, cambió mi realidad, cambió mi vida, la pude domar.

Guerrillero ocasional, reivindico mi sitio, el que nunca tenía que haber sido tachado de la sociedad, vivo, amo, sueño, camino…

Orgasmo teatral, veinticuatro años andando, el doble, experimentando vida.

  1. Hinarejos

23-08-24



1 comentario:

Marga dijo...

Bellíssim!! Enhorabona, estimat Andrés! Feliç i agraïda de poder acompanyar-te en una part d’aquest camí de vida.
Abraçada gran!!