Una rata menos.

Otro “Dios” muerto como un perro, me siento feliz, hoy al enterarme del linchamiento de semejante “terrorista” de su propio pueblo, se dibuja una sonrisa en mi pensamiento, cuánta muerte rubricada por su arrogancia, cuánto dolor esgrimido en ciudadanos sumisos, ha caído el opresor de una entidad colectiva masacrado en su propio delirio, sonrío, no por la dureza de su capitulación, si no por el solaz que quedará en las mentes de una gente capaz, ha caído otro “Dios”, posiblemente un alucinado engullido por las fauces del “dios todopoderoso”, el poder, el único “oficio” capaz de enloquecer a muchísimos humanos.

Ha muerto Gadafi el pueblo comenzará a crecer sin dioses guiadores. Comenzará a restaurarse lo destrozado por culpa del “perdonador de existencias”, espero que el pueblo sepa culminar el viaje y arribar al puerto donde puedan vivir sin “cerdos” que se lo impidan.